26 de octubre de 2020

LAS SEIS ESTRATEGIAS DE PRICE PARA INTERVENIR EN EDIFICIOS EXISTENTES


La primera tentación ante los listados, como bien supieron Eco y Borges, es la de su derribo por medio de la búsqueda de sus resquicios. Los listados y las taxonomías claman a gritos, por esencia, que sus estudiosos busquen la debilidad por la que se abren frágiles espacios intermedios. Por esas fisuras se cuelan elementos transgresores o incluso nuevas listas, y es entonces cuando comienzan grandes historias. Basta recordar el breve listado de los órdenes clásicos de la arquitectura, Dórico, Jónico y Corintio, para comprobar que entre sus intersticios surgieron otros como hierbas que crecen entre las grietas de un muro: comenzando por el Toscano, la aparición de las cariátides y todos los híbridos intermedios. Por eso el único blindaje posible de todo listado es el empleo del “etcétera” en el momento y lugar adecuado. El “etcétera”, al igual que el alquitrán impide la entrada de agua en un viejo barco de madera, evita las fugas y permite que las listas cuajen. Sin embargo es pringoso y mancha mucho. Uno empieza poniendo alquitrán y acaba de crítico en un diario.
Aquiles y su escudo demostraron que la poética de las listas oscila entre el “todo está aquí” y el insatisfactorio “etcétera” ¿Entre cuál situar, por tanto, este listado con las seis estrategias de Cedric Price para intervenir en edificios existentes? Reducción, adición, inserción, conexión, demolición y expansión son acciones modestas. Por eso mismo resulta incómoda la ausencia del tranquilizador “etcétera” ¿De verdad está completa? ¿De verdad pueden evitarse con este listado miles de libros y millones de horas de masters de rehabilitación? Por vueltas que se le puede dar, por mucho que pueda unificarse la reducción y la demolición, no parece que haya nada más que añadir.
Bueno, salvo el "dejar las cosas como estaban".
Menos mal.



2 comentarios:

Solicitar licencia de obras dijo...

Muy buena reflexión! enhorabuena por el blog!

Santiago de Molina dijo...

Gracias por la lectura. Saludos