Asociar conceptos como sencillez y elegancia no es novedad. Hablar de ambos como algo deseable tampoco. Hay una sencillez dolorosa...
Puedes encontrar el texto completo en el libro: MÚLTIPLES. ESTRATEGIAS DE ARQUITECTURA.
La limpieza de las casas no arranca con el invento de las escobas y luego de las aspiradoras. Ni siquiera a nivel simbólico. ...
2 comentarios:
Cuando estuve en Asís por primera vez, allá por 1988, los frescos basilicares de Giotto me hicieron ingresar en mi primera serenidad en movimiento; lo que dos lustros después descubrí que el zen nombra como "meditación activa". Quizá no fuera casual que aquella obra parietal glosara los estadios vitales de un tal Francesco, criatura atenta a lo fundamental, por encima de lo adjetivo, o más bien a lo sustantivo escondido en lo trivial.
Desde entonces sigo experimentando día a día esa mismísima sensación cuando desinfecto mi cuarto de baño, friego mis platos o pinto murales de un kilómetro cuadrado.
Todas ellas actividades ultrafundamentales, en su (bendita) estupidez.
Siempre se ven peligrosos aquellos actos sencillos que prescinden de lo necesario.
Saludos y gracias por tus comentarios
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